Sucedió con un distribuidor de automóviles Chevrolet en Texas, Estados Unidos que se fue muy confiado el fin de semana a su casa y regresó el Lunes para darse cuenta que a mas de 40 de sus camionetas y automóviles les habían robado sus llantas y sus rines.
Los vehículos quedaron enteros excepto por esas partes y lo hicieron muy rápidamente y, por supuesto, nadie sabe nada. La policía investiga pero sabemos que esa mercancía ya está muy lejos.
via Mashable