Nada mas emblemático que el lujo que se ostenta en cada Rolls-Royce y su «Espíritu del Extasis» como es llamado el ángel que va montado en la parrilla de cada uno de ellos, es tan exclusivo que en los nuevos modelos se retrae cuando usted apaga el carro para evitar tentaciones a los ladrones. Pero para muchas personas no siempre es suficiente y necesitan mas que eso. Por esa situación un distribuidor de éstos automóviles de Manhattan ha comisionado a un joyero llamado Jean Kemanjian una pieza especial y la ha realizado utilizando para ello diamantes por un total de 150 Kilates en color D y un puñado de ellos en color amarillo para las alas. Una pieza única que no está a la venta pero cuyo precio es de $200,000 USD ($2’100,000.00) Indispensable si quiere personalizar su compacto.