Nissan Mexicana es la división número uno dentro de la compañía japonesa, con las mejores cifras en penetración de mercado y ventas, lo que la hace un ejemplo para el resto de las subsidiarias de la firma en el mundo. Sin embargo, en México batalla. al igual que otras armadoras exitosas, por vender más autos en el mercado doméstico.
«Cuando eres la número uno y tu único reto es seguir siéndolo, haces un plan de defensa, pero nosotros queremos seguir creciendo», dice el director de la empresa en México, José Luis Valls, a la edición del 27 de septiembre de 2013 de la revista Expansión.
En 2012 la subsidiaria mexicana vendió 244,962 unidades, record para la empresa. También consiguió la cuota más alta del mercado: 24.8%, según los datos de la compañía confirmados por analistas.
Esto es superior a lo que la armadora alcanzó en Japón (12.4%), Estados Unidos (7.7%), China (6.5%), Rusia (5.3%) y el conjunto de Europa (3.9%).
Los resultados le valieron a la división el Global Nissan President Award en junio de 2013 a manos del CEO global, Carlos Ghosn, un premio interno que la armadora da a las personas o grupos de trabajo que destaquen por sus resultados.
El secreto está en que la subsidiaria aprovechó el auge que vive el sector automotriz en México. La industria representa 3.6% del PIB del país y contribuye con 28.4% de las exportaciones manufactureras, según un informe de la BBVA Research.
La crisis de 2008 hizo que las armadoras multinacionales reubicarán sus operaciones en los países que ofrecieran condiciones más ventajosas en términos de costos y eficiencia, explica el experto en competitividad de la consultora global KPMG, Luis Ricardo Rodríguez.
«Pero solamente con bajos costos no puedes competir. Si no tienes calidad, estás fuera», dice el director general de Nissan América Latina y el Caribe, José Román.
Nissan no es la única armadora con éxito en México y al igual que el resto de las firmas automotrices en el país, la japonesa debe vender más autos en el mercado doméstico.
Mexico, pese a ser el octavo productor de vehículos a nivel mundial y el sexto en exportaciones, está lejos del top ten en ventas internas. Vende sólo 7.5 autos por cada 1,000 habitantes, menos que Argentina, Brasil, China y Rusia.