Para José Román, CEO de Nissan Mexicana, el coronavirus COVID-19 revolucionará la forma de vender, de trabajar y de producir vehículos. El directivo cuenta que la pandemia puso a prueba la capacidad de la empresa de poder operar de forma remota. Nissan tiene en México 15,000 empleados, cuatro plantas de vehículos, un centro de desarrollo tecnológico, una financiera y más de 200 concesionarios.
“Hace cinco años hubiera sido impensable operar todo esto desde casa”, cuenta. “Pero ahora hemos podido conectar a 1,000 empleados en una videollamada”, dice.
La industria automotriz, y en general todas las manufactureras, se habían mostrado escépticas ante el trabajo remoto, pero ahora sus directivos ven en este esquema una oportunidad para reducir sus costos fijos y sus tiempos de operación.
Según un análisis hecho por Newmark Knight Frank (NKF), el «home office» puede permitir a las corporaciones reducir entre 10% y 15% el espacio físico de sus oficinas, y hasta en 30% los costos asociados.
«No pertenezco a la generación de los «millennials» y no pensaba que fuera posible trabajar de forma remota, pero ahora veo claramente que sí se puede. Yo llevo casi un mes haciendo «home office» y creo que estoy trabajando mucho más”, dice Román entre risas. “Claro que extraño el contacto humano, que también es muy importante, pero quizá podamos plantear en el futuro esquemas mixtos, en donde estemos tres o cuatro días en la oficina y el resto trabajando en casa”, añade.
Nissan no es la única empresa que está viendo en esta contingencia una oportunidad para digitalizar sus operaciones y ajustar sus esquemas de trabajo. Renault también ve en la digitalización una apuesta para el futuro, tanto para avanzar en los esquemas de trabajo remoto, como para comercializar sus vehículos. Ambas compañías alistan inversiones en esta dirección.
Los especialistas advierten que para migrar parte de la jornada de los empleados a un esquema de «home office» se requiere que la empresa suba información a la nube. Según Frost and Sullivan, las compañías ahorrarían entre 60 y 75% de los costos anuales si se trasladan a la nube, en lugar de almacenar sus datos en servidores físicos.
Daniel Echeverri, CFO de Renault México, cuenta en una videollamada que la empresa ha puesto pausa a la mayoría de sus proyectos excepto a aquellos enfocados en la digitalización.
“Ahora nos estamos enfocando en cómo hacemos para tener procesos internos más digitales, como el pago de la nómina, las auditorías, la administración de los inventarios; pero también en cómo hacer que el proceso de compra de un auto sea algo mucho más simple, mucho más digital y mucho más automático”, dice. “Vamos a invertir en tecnología que nos permita tener procesos más óptimos y que nos permita ser más digitales”, añade.
Ambas compañías están aprendiendo sobre la marcha.
“Antes de esto, nunca hubiéramos pensado llegar a un punto en donde tuviéramos al 100% de los empleados trabajando desde sus casas”, dice Echeverri. “El «home office» va a cambiar la dinámica de trabajo en todas las empresas. Yo creo que esto será algo positivo dentro de esta situación. Habrá que ver cómo evoluciona esto pero definitivamente vamos a cambiar la forma de operar en las empresas”, añade José Román, de Nissan.
via CNNExpansión