No solo Volkswagen ha perdido dinero al mentir sobre las emisiones de CO2 y NOx en sus vehículos. En Japón la empresa Mitsubishi también fue agarrada «con las manos en la masa» mintiendo sobre los rendimientos de combustible de sus vehículos lo que la llevó a tener que pagar multas sobre lo mismo y perder la confianza de sus clientes.
Ahora la predicción interna es que este año que termina fiscalmente en febrero del 2017 la empresa perderá $1,390 Millones de Dólares que es un costo que quebraría a cualquier empresa ya que por ejemplo el Año pasado tuvo utilidades de $1,200 Millones de Dólares.
La única manera de sobrevivir es lo que hicieron: vendieron una parte importante de su empresa a su competencia: Nissan.