Todos hemos manejado el alcohol en algún momento de nuestras vidas, unos mas que otros, ya después del tercer tequila somos invisibles, somos galanes, sabemos bailar y muchas cosas mas.
Pero la borrachera que agarró la señorita de 26 años, Rhian Jeremiah, estuvo mejor. Ya que atacó a mordidas el techo de un Fiat 500 que no le estaba haciendo nada.
La ocasión fue el funeral de su novio y en el cual después de unas cuantas bebidas se molestó con un amigo y la molestia fue tan fuerte que se fue sobre su automóvil y lo comenzó a morder causando algo así como $7,000.00 en daños. El juez la ha condenado a que los pague y que además asista a 20 sesiones de Alcohólicos Anónimos.
Extraños los hábitos de alimentación de las inglesas.